YO Fraile...? ¡JA! ¡JA!

¿Te gustan las mujeres, la disco y las pelas? 

¿Te enamoras con facilidad?

 

De entre todas las opciones que existen en la vida, todo joven debería plantearse además muy seriamente estas dos opciones: ¿ser gigoló o ser fraile?

 

Entregar tu cuerpo por dinero. Vida fácil y cómoda. ¿Crees que exageramos? Piensa que mucha gente actúa así, aunque de una manera mucho más hipócrita.

 

Todos aquellos que trabajan única y exclusivamente por la pasta, por triunfar a cualquier precio, por tener poder sin importarles cómo lo consiguen.

 

Gente que en sus profesiones sólo ven una forma cómo otra cualquiera de hacerse ricos. O que no tienen mayor motivación que un salario mal ganado.

 

Si has decidido no ser un gigoló, un vividor real o encubierto, dedícate a encontrar y desarrollar tu verdadera vocación, lo que más te gusta, aquello para lo que de verdad vales. Y valora la opción de entregarte a ti mismo: tu cuerpo y tu espíritu. Por amor. Al mundo. A los hombres. A Dios, que es lo mismo. Vida difícil, incómoda: como toda vida vivida al servicio de un ideal.

 

Si eres un hombre y no un pelele, tienes la obligación moral de plantearte si quieres vivir entregado al ideal más hermoso: anunciar la Paz y el Amor entre los hombres; porque todos somos iguales y hermanos; de la mejor forma posible: con tu ejemplo, con tus hechos, con tu vida.

 

Y si decides...

 

Que no es tu vocación, no olvides que elijas el camino que elijas debe ser sembrado de paz y de bien. (P.C.)

 

 

 

¿Borrachín?, ¿Galante? ¿Enamoradizo?

 

Bien. Tal vez seas el fraile perfecto.

 

¿Conoces bien el mundo y la vida? Pues podrás ayudar a los hombres y mujeres de este mundo. Y no serás la primera: Santa María Magdalena, sin ir más lejos, también fue como tú.

 

Piénsalo. Piensa en ser Fraile. Más que valor, hace falta mucho amor.

 

Podrías ser Fraile Franciscano


Fray Mauro tiene su sitio Web

www.fraymauro.com